Uncategorized

pag-18-salud-mental
Salud mental en el trabajo: Un nuevo foco de atención

 Salud mental en el trabajo:

Un Nuevo Foco de Atención

En los tiempos actuales, las licencias médicas ligadas a problemas de salud mental han aumentado en cantidad y están comenzando a ser temas de atención para las empresas creando políticas de RR.HH. para mejorar la calidad de vida laboral de los trabajadores.

El ya conocido stress está pasando la cuenta a gran cantidad de trabajadores – en Chile y en el mundo -que intentan lidiar con muchas horas de trabajo, evaluaciones constantes, situaciones país poco auspiciosas, poco tiempo de vida familiar, vida sedentaria y escaso tiempo libre.

Esto se ha demostrado en el aumento de licencias psiquiátricas que reciben las empresas y que se traducen en prescindir de trabajadores durante semanas, meses o incluso años o en bajas de productividad frente a la desmotivación y la angustia. Por esto, muchas compañías han decidido ser proactivas y han generado planes junto a los departamentos de Recursos Humanos para reducir la tensión en sus equipos: planes en convenio con gimnasios, comida saludable a la oficina, chequeos médicos constantes, consejeros, entre otros, que permiten mejorar la calidad de vida en el trabajo y que los trabajadores se sientan mejor.

Además de la prevención, las compañías se han preocupado de dar apoyo a los trabajadores que no lo están pasando bien anímicamente. Algunos incluso ha optado por tener consejeros para poder escucharlos, que no se sientan solos en ese proceso o asustados por el futuro de sus carreras. En otros casos, contratan gente mayor dentro del equipo que pueda a través de consejos y experiencia, demostrar que se puede ser exitoso sin deteriorar la salud mental.

Por su parte, los trabajadores demuestran que se sienten cada vez más cómodos de exponer los temas que les provocan problemas en esta materia, permitiendo también, buscar soluciones conjuntas y no esperar a que empeore.

Nadie está libre de tener algún problema de salud mental que afecte no solo la vida cotidiana sino que también la vida laboral. Lo importante es tener el apoyo, buscar la ayuda indicada y educar en relación a esta materia. El llamado a las empresas es a humanizar a los trabajadores, a entender que los problemas de salud mental son una realidad de nuestra época y que es necesario tener políticas de Recursos Humanos realies y efectivas enfocadas a este tema.

Algunas cifras

En el Reino Unido, el reporte más reciente del jefe de la oficina médica de Inglaterra, publicado en 2014, estima que el número de días perdidos por “estrés”, depresión y ansiedad” incrementaron en un 24% entre el 2009 y el 2013.

La última encuesta indicó que el 73% de los empleados testeados tienen al menos una sensación de estrés relacionada con el trabajo; 41% tienen más de una; 20% tienen al menos 3 o más.

En Toronto, un reporte de la escuela de Rotman publicado el año pasado, muestra que el 41% de los empleados de las industrias reportaban altos niveles de ansiedad.

Un estudio en Gran Bretaña, encontró que la mitad de los empleados encuestados dijeron que el estrés era causa de una expectativa ilógica para cumplir con los plazos; el 31% dijo que el hecho que no se consultaran los cambios aumentaba el estrés, mientras que un 27% dijo que la falta de control sobre el trabajo que hacían era la razón. En suma, 5% de los empleados dijeron que han sido molestados frecuentemente y el 15% dijeron que fueron molestados al menos una vez durante los últimos 12 meses.

 

*Fuente diario El Mostrador

 

Read More
Smileys background. 3d rendered illustration.
El Camino de la Felicidad

 El Camino de la Felicidad

Nos parece fundamental para enfrentar cualquier desafío, ya sea profesional o personal, tener muy claro lo que buscamos para ser felices. En esta materia, queremos compartir un interesante artículo escrito por Juan Carlos Casco en su blog emprendedorex. Que lo disfruten.

El camino de la felicidad.

 “Cuando yo tenía cinco años, mi madre siempre me decía que la felicidad es la clave para la vida. Cuando fui a la escuela, me preguntaron qué quería ser cuando fuera grande, escribí feliz. Me dijeron que yo no entendía la pregunta. Les respondí que ellos no entendían la vida”. John Lennon.

Aprender a ser feliz como objetivo vital del ser humano. El auténtico sentido de la vida es la felicidad, una meta que en realidad es camino. Un reto tan importante y de sentido común, que tendría que convertirse en Agenda del milenio. Si como seres humanos, desde los gobiernos y las organizaciones, adoptásemos este objetivo, podríamos abrir una senda nueva para la humanidad, pero esa transformación global nos convoca a hacer un cambio en el yo, en cada uno de nosotros de manera individual.

“Todo el mundo quiere ser feliz, todo el mundo quiere tener una vida exitosa”. Dalai Lama.

Esta reflexión nos convoca a una serie de preguntas: ¿Soy realmente feliz? ¿Nuestra vida se enfoca en la felicidad? ¿El concepto de éxito de la sociedad de consumo y la felicidad son la misma cosa? ¿Me doy permiso para ser feliz? Y en ese caso ¿Me abro al aprendizaje para serlo?

En el momento actual, nuestra sociedad vive en una crisis existencial porque ha perdido el verdadero sentido de la vida. Pese a que tenemos más bienes, mejor calidad de vida, más recursos materiales… Somos más infelices.

Buscamos ofuscados el sentido de la existencia, cuando la existencia tiene su propio sentido y lo que necesitamos es conferir sentido a la nuestra propia y la de nuestras comunidades.

La psicología tiene que jugar el  importante papel de ayudar al ser humano en este momento para la búsqueda de la realización personal y la consecución del bienestar y la felicidad.

La felicidad no es una meta, es un camino.

“La felicidad no está en la propia felicidad, sino en la puerta de espera de la misma”.  Esta reflexión hace que nos replanteemos el sentido de la existencia y que vivamos activa y plenamente el presente sin postergar la llegada de la felicidad. Vivir el aquí y el ahora. Este pensamiento nos lleva al disfrute en el ahora de lo que queremos conseguir.

El cerebro humano anticipa continuamente hechos, en muchas ocasiones se produce mayor bienestar en el camino de conseguir un logro, que cuando éste se ha materializado.

Felicidad y personalidad. La apertura al cambio.

¿Qué podemos entender por bienestar? ¿Cómo podemos llegar a él? Para responder a estas preguntas tenemos que mirar a nuestro interior y abrirnos al cambio, tenemos que aceptar que podemos cambiar nuestra forma de pensar y ver el mundo, adaptarnos al cambio.

La adaptación juega un papel esencial en la personalidad, nuestra personalidad no es inamovible, si nuestros comportamientos no nos conducen a la felicidad, siempre podremos modificarlos.

La personalidad posee automatismos pero podemos actuar sobre ellos si desarrollamos  la voluntad y el dominio emocional para hacerlo. No es una realidad fija que perdure de por vida, como personas vamos forjando nuestra personalidad en el tiempo. El conocimiento consciente de nuestras emociones y el desarrollo de mecanismos para su regulación, haciendo uso de la “metapersonalidad” para intervenir sobre aquellos pensamientos que nos producen malestar y neutralizarlos; es un camino para crear una personalidad positiva en torno a la consecución de una meta.

El ser humano puede evolucionar desde la postura “yo soy así” a “yo puedo cambiar”, como movimiento que nos abre el espacio al bienestar y a la felicidad (primer giro transformacional).

El segundo giro transformacional hacia la felicidad nace de la modulación de las conversaciones del ser en torno a sus 3 ejes conversacionales (Martin Bubber): las conversaciones que mantenemos con nosotros mismos (alrededor de 60000 cada día), las que tenemos con los demás y con el misterio de la vida. De no propiciar una regulación de las mismas, podemos sucumbir desbordados en su enorme torrente.

En esta senda, también podemos aprender a cambiar el signo de nuestras conversaciones (de negativo a positivo). Si la deriva arbitraria de nuestro cerebro a la hora de producir juicios y sentimientos negativos, no tiene un contrapeso, nuestra vida puede quedar atrapada en un estado de ánimo de negatividad permanente.

“Mi vida estuvo llena de desgracias, muchas de las cuales jamás sucedieron.” Descartes.

El ejercicio no es fácil, exige una disciplina para interpelar nuestros pensamientos negativos, poner en cuarentena los juicios destructivos, desarrollar hábitos saludables (hacer deporte, sonreír, cooperar…).

Efecto Pigmalión, efecto Galatea y actitud positiva.

En este caso, juegan un importante papel las expectativas que tenemos de nosotros mismos o que los demás tienen de nosotros: ¿Qué esperan los demás de mí? ¿Qué espero yo de mí misma? Aquí se refleja  la función del efecto Pigmalión y el efecto Galatea. A menudo actuamos en función de lo que los demás esperan de nosotros, y esto nos genera situaciones de estrés que nos cierran la puerta al bienestar. Así por ejemplo, ante las cosas de la vida que consideramos importantes, nuestra tensión aumenta cuando analizamos lo que los demás esperan de nosotros y si estaremos o no a la altura de las expectativas, en lugar de actuar desde la convicción en nuestras propias posibilidades.

El efecto Galatea se basa en cómo mis expectativas condicionan mis resultados, si son altas me ayudarán a alcanzar mis objetivos, desde esta posición, el control de mi vida está en mí. Con el efecto Pigmalión, mis resultados dependen de las expectativas y opiniones de otros.

Cultivar el efecto Galatea ayuda a poner el centro de gravedad de mi vida en mi persona, a no depender de otros, a crear un pensamiento y actitud positiva, a reconocer mi valía, a atreverme a enfrentar grandes desafíos sin esperar opinión o permiso de terceros.

El ejercicio de la visualización que consiste en traer imágenes a nuestra mente, en este caso de nosotros logrando aquello que nos hemos propuesto, es de gran ayuda para alcanzar con éxito nuestra meta. El hecho de visualizarnos haciendo lo que soñamos enriquece nuestro deseo actual y nos motiva a realizar todo lo que esté en nuestras manos para alcanzarlo, abriendo el camino al aprendizaje.

Cuando los demás tienen una interpretación de mí, debo tener en cuenta esa percepción si me motiva a ser una mejor persona, cuando sus opiniones son negativas, es mejor evaluar si hay algo de cierto en ello, y por ende, admitir y trabajar en lo que puedo mejorar, siendo objetiva conmigo misma, y si no, desechar eso que no me ayuda.

El cultivo de la personalidad basada en un optimismo fundado, que pone el control en el individuo, en torno a la dedicación, el esfuerzo y el aprendizaje; está en la base de la felicidad.

Para la felicidad es muy importante aprender a conjugar el efecto Galatea con el efecto Pigmalión, pues es altamente productivo trabajar desde la autoconfianza y la motivación extra que nos proporcionan las opiniones y expectativas positivas de otras personas. Lo ideal es que ambos efectos se retroalimenten.

Tener autoestima también genera bienestar, decirte a ti misma que eres una persona de valor en igual medida que los demás: “Soy capaz de hacer cosas tan bien como la mayoría de la gente”, crea una disposición positiva para la acción (motivación) potenciando la autoestima frente a la autopunitividad. Sin embargo, si nos fijamos metas excesivamente altas puede generar a la postre una actitud negativa hacia el yo.

Según Bandura, un concepto muy importante en psicología que podría entenderse bien con la autorregulación es el auto-concepto (mejor conocido como autoestima). Si a través de los años vemos que hemos actuado más o menos de acuerdo con nuestros estándares y hemos tenido una vida llena de recompensas y reconocimientos personales, tendremos un auto-concepto agradable (autoestima alta). Si, de lo contrario, nos hemos visto siempre como incapaces de alcanzar nuestros estándares y nos hemos castigado  por ello, tendremos un pobre auto-concepto (autoestima baja). Lo que seas en la vida depende en gran parte de ti, siempre tienes la posibilidad de hacer que las cosas sucedan (al menos sobre las que tienes control).

El reconocimiento y aceptación de buenas y de malas cualidades y tener una visión positiva de la vida pasada genera bienestar.

En conclusión, como seres humanos tenemos una aspiración legítima al bienestar y a la felicidad, ello nos convoca a aprender a mirar hacia nuestro interior, trabajar y perfeccionar nuestra personalidad, modificando las prácticas y las conductas que pueden bloquear el proceso.

Una actitud positiva ante la vida, sustentada en la autoconfianza y la búsqueda de una influencia positiva de otras personas, nos abre el camino a la felicidad desde el esfuerzo y el aprendizaje en un proceso de crecimiento a lo largo de la vida.

“Te convertirás en aquello en lo que piensas constantemente. Cada día, cada minuto, cada segundo de tu vida, estás construyendo tu futuro en tu manera de pensar”. Earl Nightingale.

El fin último del liderazgo es desarrollar disciplina interior para conducirse a la felicidad, como paso intermedio para hacer lo mismo con una comunidad de personas.

Pongamos el rumbo de nuestra vida hacia la felicidad. No hay tiempo que perder.

Read More
Grafología mayo
La Grafología en la Selección de Personal

 La Grafología en la Selección de Personal

¿Te has preguntado por qué en algunas entrevistas te hacen escribir una carta? Solo basta que una persona escriba un par de párrafos y lo firme en una hoja en blanco para conocer rasgos determinantes de su personalidad.

En Chile, la grafología – pseudociencia que pretende describir la personalidad de un individuo y determinar características generales del carácter, acerca de su equilibrio mental (e incluso fisiológico), la naturaleza de sus emociones, su tipo de inteligencia y aptitudes profesionales mediante el examen de la escritura – se utiliza como complemento a las entrevistas personales para determinar si un candidato es apto para un cargo determinado. Existen profesionales que se han preocupado de estudiarlo y así en muchos casos derrotar a los famosos test que gracias a internet, han perdido algo de credibilidad en cuanto a la fiabilidad de sus resultados.

Hoy la grafología es una tendencia gracias a sus múltiples beneficios, tales como la rapidez y confiabilidad en los resultados, ya que no es posible manipular una dinámica neuromotora. Por otro lado, no se necesita tener antecedentes previos del candidato, solo el cargo y el perfil deseado por la empresa. En alrededor de 24 horas es posible tener un informe completo.

Read More
lider-jefe
Líder o Jefe ¿cuál es la diferencia?

 Líder o Jefe ¿Cuál Es La Diferencia?

Muchas veces se tiende a pensar que la jerarquía implica liderazgo, tanto por la sociedad como por aquellos que asumen las jefaturas. Pero es una creencia errónea partiendo de la base que un trabajador no puede elegir a su jefe pero sí a que líder seguir.

Los líderes y los jefes pueden ser la misma cosa o dos cosas diferentes, dependiendo de las cualidades que tengan como persona. Un líder podría ser un jefe y un jefe podría ser un líder, pero no todos los jefes son líderes. Si los definimos, “Jefe” se define como la persona que tiene autoridad o poder sobre un grupo para dirigir su trabajo o sus actividades. En cambio, “Líder” es una persona que inspira, guía y dirige a un grupo de personas para alcanzar un propósito o por una causa en común. Es alguien a quien se le asigna una autoridad moral y a quien se le sigue por cuenta propia.

En la teoría, la diferencia está clara pero para poder guiar mejor el cómo definir estos perfiles, podemos considerar estas 10 diferencias:

1.- La percepción sobre su autoridad: para un jefe al uso, la autoridad es un privilegio concedido por su puesto de mando. Para un buen líder, en cambio, la autoridad es un privilegio solo si es una herramienta útil para la organización. El jefe hace suya la máxima de “yo soy el que mando aquí”; mientras que el líder encuentra su inspiración en la frase “yo puedo ser útil aquí”. El jefe espolea al grupo y el buen líder se mantiene al frente, los guía y se compromete día a día.

2.- Imponer vs convencer: el jefe basa su influencia en la autoridad que dimana del cargo que ostenta. El líder se gana la simpatía y le voluntad de quienes le rodean. El jefe hace valer su posición dentro de la jerarquía, mientras que el líder cultiva y cuida su liderazgo cotidianamente. El jefe siente la necesidad de imponer su criterio, usando largos argumentos; el líder convence y ejemplifica, sus argumentos no buscan desterrar a los demás, sino construir conocimiento y plan de acción.

3.- Miedo vs confianza: el jefe infunde temor, miedo, suele amenazar, y su equipo recela de él, le ponen buena cara cuando está cerca pero le critican duramente cuando no está presente. El líder es una fuente de confianza, empodera a las personas, genera entusiasmo cuando trabaja, estimula al grupo reconociendo las buenas labores y el esfuerzo de sus miembros. El jefe precisa obediencia ciega, el líder persigue que la motivación impregne a todos. Si sientes miedo de tu superior, es un jefe corriente, si en cambo lo valoras y aprecias, tu superior es un líder.

4.- La gestión de los problemas: El jefe quiere señalar a quien ha cometido el error; implanta la creencia de buscar culpables. De este modo, abronca, castiga y grita si algo no sale bien, para advertir al culpable y al resto de personas. El líder sabe entender los errores y calmadamente reorienta la situación. No se encarga de señalar los errores ajenos ni de acusar a nadie, sino que busca solucionar el problema y ayudar a quien lo ha cometido a levantarse.

5.- Organización técnica vs organización creativa: el jefe distribuye las tareas y ordena, y se queda supervisando si sus órdenes están siendo seguidas a rajatabla. El líder estimula, aporta ejemplo, trabaja codo con codo con sus colaboradores, es coherente con lo que piensa, con lo que dice y con lo que hace. El jefe hace que las tareas sean una obligación, pero el líder sabe buscar la motivación en cada nuevo proyecto. El líder transmite ganas de vivir y de progresar.

6.- Órdenes vs pedagogía: el jefe conoce el funcionamiento de todo, el líder sabe hacer pedagogía de cada tarea, sabe enseñar. El primero recela de su secreto que le ha llevado al éxito, el segundo tutela decididamente a las personas para que puedan desarrollarse y hasta superarle, El jefe organiza la producción, pero el líder les prepara para que alcancen todo su potencial.

7.- El grado de cercanía personal: el jefe se relaciona con su equipo de forma despersonalizada, como fichas de un tablero. El líder conoce personalmente a todos sus colaboradores, se interesa genuinamente por sus vidas, no los usa ni los cosifica. Es respetuoso con la personalidad de cada uno, defiende a las personas independientemente de su posición en la jerarquía.

8.- Esquemas cerrados vs esquemas abiertos y en constante desarrollo: el jefe dice “haz esto”, el líder dice “hagamos esto”. El jefe persigue la estabilidad, el líder promociona a sus colaboradores mediante el trabajo grupal y la formación de otros líderes. El líder es capaz de integrar el compromiso sincero de los que le rodean, diseña planes con fines claros y compartidos, contagia a los demás con su esperanza y determinación.

9.- Cumplir vs liderar: el jefe llega puntual, pero el líder siempre llega el primero. El jefe espera a los colaboradores sentado en su sillón, el líder sale a darles la bienvenida. El líder quiere mantener siempre su presencia como un guía del grupo e inspira compromiso, cordialidad y lealtad. El jefe se conforma con un desempeño aceptable de sus miembros, el líder quiere ver más allá y quiere que su grupo despunte.

10.- Poder vs inspiración: el jefe defiende con uñas y dientes su posición de autoridad; el líder hace que la gente normal se sienta extraordinaria. El jefe ansía la reverencia, pero el líder logra comprometer a su equipo en una misión que les permite superarse y trascender. El jefe quiere mantener sus privilegios; el líder dota de significado e inspiración a su trabajo su vida y la de los que le rodean.

Read More